¿PUEDO INFECTARME DE LEISHMANIOSIS?
La leishmaniasis es, por antonomasia, la enfermedad de la pobreza. Ni las personas ni los animales son inmunes a ella. El Museo Nacional de Ciencias Naturales inaugura una exposición temporal dedicada a la leishmaniasis, una enfermedad tan extendida en algunos países del mundo, como desconocida en otros.
Si bien suele ser una enfermedad asociada a los perros, más de un millón de personas al año se ven afectadas por ella, ignoradas por pertenecer generalmente a los segmentos sociales más desfavorecidos.
Coincidiendo con la reciente celebración en mayo de la sexta edición del Congreso Mundial de Leishmaniasis en Toledo, el Museo Nacional de Ciencias Naturales colaborará en la difusión y conocimiento de esta enfermedad mundial, que va mucho más allá de nuestras mascotas, en colaboración con el DNDi (Drugs for Neglected Diseases Inicitaive) y el Instituto de Salud Carlos III.
La enfermedad en humanos
¿Qué es la leishmaniasis?
La leishmaniasis es una enfermedad producida por un parásito del género Leishmania que se transmite por la picadura de un insecto infectado por el parásito, el flebótomo o mosca de la arena. Hay dos formas clínicas de presentación, la leishmaniasis cutánea y la visceral.
¿Cuáles son los signos y síntomas de la leishmaniasis?
La leishmaniasis cutánea se caracteriza por la presencia de una o más lesiones ulceradas en la piel que se desarrollan después de semanas o meses de la picadura. Generalmente son indoloras, pero pueden ser dolorosas cuando se infectan. Normalmente curan, incluso sin tratamiento, aunque pueden durar meses o años y dejar cicatrices.
La forma visceral es la más grave y afecta a varios órganos internos, habitualmente el bazo, el hígado y la médula ósea. Generalmente los síntomas son fiebre y pérdida de peso, acompañados de un aumento del tamaño del hígado y el bazo. También pueden alterarse los análisis de sangre (anemia, etc.).
¿Cómo se infectan las personas?
El contagio a las personas se produce a través de la picadura del mosquito flebótomo que se ha contagiado al picar previamente a un animal infectado, en España habitualmente el perro y algunos animales silvestres como la liebre y el conejo. La enfermedad no se transmite por contacto directo de persona a persona o de animal a persona. No es un mosquito común, es un insecto al que se le llama flebótomo y es más pequeño, de color amarillo-pajizo y de vuelo silencioso.
Las horas de mayor actividad del mosquito flebótomo que transmite la leishmaniasis son al anochecer, las primeras horas de la noche y al amanecer, no actúa durante el día. Si usted vive en una zona donde hay estos mosquitos flebótomos, trabaja al aire libre a esas horas, duerme los meses de calor con la ventana abierta o no se protege de las picaduras, tiene más probabilidad de ser picado y adquirir la infección. Por lo que la mejor forma de disminuir el riesgo de leishmaniasis es evitar las picaduras del mosquito flebótomo, tanto en casa como fuera de ella.
¿Si me hubiera picado un mosquito flebótomo infectado, cuándo desarrollaría la enfermedad?
El tiempo que transcurre desde la picadura del mosquito flebótomo hasta que se desarrolla la enfermedad puede variar desde diez días a varios meses. Por lo regular es de dos a seis meses en la forma visceral y de dos semanas a cuatro meses en la forma cutánea.
¿Hay personas con más riesgo de contraer la enfermedad?
Todas las personas de todas las edades tienen riesgo de contraer la infección si viven en una zona endémica. Los pacientes con problemas de inmunidad tienen más probabilidad de desarrollar la enfermedad.
¿Es una enfermedad frecuente en la Comunidad de Madrid?
La leishmaniasis es una enfermedad poco frecuente pero desde el año 2010 hay un aumento importante del número de casos en la zona suroeste (Fuenlabrada, Leganés, Humanes de Madrid y Getafe), por lo que en esa zona hay que extremar las medidas de prevención y control.
¿Qué debo hacer si pienso que puedo tener leishmaniasis?
Debe acudir al médico y no olvidar explicarle por qué piensa que tiene la enfermedad, más aún si vive en una zona donde sabe que hay más mosquito flebótomos.
¿Tiene tratamiento la leishmaniasis?
Sí tiene tratamiento y es eficaz. La leishmaniasis visceral necesita un tratamiento específico, que en general se hace en un hospital y evoluciona favorablemente.
Os adjuntamos la guía "LEISHMANIASIS: UNA ENFERMEDAD QUE SE PUEDE PREVENIR" editada por el Servicio Madrileño de Salud.
Fuente: SaludMadrid