CIENTÍFICOS INVESTIGADORES DE LA UNIVERSIDAD DE RICHMOND ENSEÑAN A LAS RATAS A CONDUCIR
Investigadores de la Universidad de Richmond (Virginia) enseñaron a las ratas a conducir un pequeño automóvil hecho de un recipiente de plástico para alimentos como parte de un estudio sobre salud mental.
Las ratas han aprendido a saltar a través de aros, resolver laberintos e incluso jugar a las escondidas. Ahora pueden conducir autos. Investigadores de la Universidad de Richmond (Virginia) enseñaron a las ratas a conducir un pequeño automóvil hecho de un recipiente de plástico para alimentos como parte de un estudio sobre salud mental.
La profesora de neurociencia conductual Kelly Lambert y sus colegas acaban de publicar esta investigación en el artículo de la revista Behavioral Brain Research "La exposición al medio ambiente enriquecido acelera las habilidades de conducción de roedores".
Esta investigación explora cómo realizar tareas complejas, como conducir, puede informar aún más a la comunidad científica sobre el tratamiento de afecciones de salud mental como la ansiedad y la depresión.
"Ya sabíamos que los roedores podían reconocer objetos, presionar barras y encontrar su camino alrededor de los laberintos, pero nos preguntamos si las ratas podrían aprender la tarea más compleja de operar un vehículo en movimiento", dijo Lambert.
El equipo de investigación construyó un pequeño automóvil para las ratas con un recipiente de plástico transparente para alimentos con ruedas, con un suelo de aluminio y tres barras de cobre que funcionan como un volante. Un total de 17 ratas fueron entrenadas para conducir en arenas rectangulares. Las ratas que pasaron la educación del conductor fueron recompensadas con Froot Loops.
"Aprendieron a navegar el automóvil de maneras únicas y se involucraron en patrones de dirección que nunca habían usado para llegar finalmente a la recompensa", dice Lambert. Los resultados de este estudio incluyeron:
- Los cerebros de las ratas son más flexibles de lo que se pensaba anteriormente. Este hallazgo podría usarse para comprender cómo aprender nuevas habilidades puede generar una sensación de control sobre el entorno del animal que finalmente puede reducir el estrés.
- En el estudio publicado, las ratas que participaron en el entrenamiento de manejo tenían perfiles de hormonas del estrés más saludables que antes de su entrenamiento. Los investigadores evaluaron las hormonas midiendo los niveles de dos hormonas: la corticosterona, un marcador de estrés, y la deshidroepiandrosterona (DHEA), que contrarresta el estrés. La proporción de DHEA a corticosterona en la caca de las ratas aumentó en el transcurso de su entrenamiento de manejo.
- Las ratas alojadas en un entorno complejo y enriquecido (es decir, un entorno con objetos interesantes con los que interactuar) aprendieron la tarea de conducir, pero las ratas alojadas en jaulas de laboratorio estándar tuvieron problemas para aprender la tarea (es decir, reprobaron su examen de manejo). "Eso significa que el complejo entorno de vida condujo a una mayor flexibilidad conductual y neuroplasticidad", dijo Lambert. "Esto nos recuerda que nuestros cerebros cambian constantemente en respuesta a nuestros entornos, y que somos responsables de mantener nuestros cerebros en cada momento". Fuente: Universidad de Richmond.
La Universidad de Richmond tiene un video de las citadas ratas conduciendo vehículos. Para ver el vídeo pulsa en el siguiente ENLACE.
Fuente: Universidad de Richmond