EL UROGALLO CANTÁBRICO: UNA POBLACIÓN AMENAZADA AL LÍMITE
El urogallo occidental (Tetrao urogallus), el mayor urogallo del mundo, es una especie forestal circumboreal de la que sólo quedan dos poblaciones en España: una en la cordillera Cantábrica y otra en los Pirineos. Ambas sufren un severo declive, especialmente acentuado en la población cantábrica, lo que motivó su declaración en 2018 como “especie en situación crítica”.
Para desarrollar planes de gestión de las poblaciones amenazadas de fauna silvestre es necesario disponer de información veraz y actualizada sobre sus parámetros demográficos, ya que a partir de los modelos resultantes es posible comprender y prever la dinámica poblacional e implementar estrategias de gestión más adecuadas.
Científicos del Grupo de Investigación en Gestión de Recursos Cinegéticos y Fauna Silvestre del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC – CSIC, UCLM, JCCM), en colaboración con investigadores y técnicos de gestión de la fauna silvestre de varias instituciones portuguesas, suizas y españolas, han utilizado modelos de captura-recaptura espacial y muestreo no invasivo de ADN para estimar el tamaño actual de la población de urogallo en toda la cordillera Cantábrica. Además, para la evaluación de su estado poblacional, han analizado la trayectoria de la población en los últimos 42 años (1978-2019) en 196 leks de la vertiente sur de la cordillera, utilizando un modelo poblacional integrado.
Para 2019, se ha estimado mediante captura-recaptura espacial el tamaño de toda la población en 191 individuos (165-222) con 60 (48-78) hembras y 131 (109-157) machos. Los resultados del estudio muestran que, desde la década de 1970, se ha producido una reducción el 83% del área ocupada por el urogallo en la cordillera Cantábrica. A su vez, la población en los leks estudiados en 2019 estaba en torno al 10% del tamaño estimado para 1978. La supervivencia anual se estimó en 0,707 (0,677-0,735), y el reclutamiento per cápita en 0,233 (0,207-0,262).
El Dr. José Jiménez, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) adscrito al IREC y primer firmante del artículo, señala que “estos parámetros nos marcan las causas inmediatas del declive, ya que son claramente insuficientes para mantener una población estable”.
Los autores de este trabajo de investigación sugieren trabajar para mejorar el reclutamiento y la supervivencia del urogallo, y hacer una gestión forestal que fomente su conservación. Además, señalan que la gestión de la especie debería contemplar la evaluación y consideración de la viabilidad genética de esta población.