Las heces de las termitas, un antibiotico natural
Los científicos llevan tiempo preguntándose por qué las termitas son tan resistentes a las enfermedades, e investigadores de la Universidad de Florida han encontrado la respuesta: sus excrementos funcionan como un antibiótico natural.
Las termitas utilizan sus propias heces como material de construcción del nido, y precisamente por ello, son tan resistentes a las enfermedades: esto promueve el crecimiento de bacterias beneficiosas, que a su vez suprime los patógenos.
Este descubrimiento supone un gran avance tanto para el control de las termitas como para allanar el camino a los nuevos antibióticos humanos.
Las termitas son uno de los grandes problemas a los que nos enfrentamos los técnicos en control de plagas: se gastan unos 40 mil millones de dólares en todo el mundo para erradicar el problema.