Las infestaciones de chinches han crecido en Canadá de un 20 a un 50 por ciento en los últimos tres años, según una encuesta realizada a 67 inspectores de Salud Pública del país.
Esto supone un crecimiento anual del 8 por ciento.
Edificios de apartamentos en zonas residenciales, viviendas particulares, zonas gubernamentales y hospitales de todo Canadá están sufriendo invasiones de chinches, aunque las zonas más afectadas son los grandes centros urbanos, como Toronto, Winnipeg, Montreal, Calgary y Vancouver.
El problema llega porque los administradores de edificios no tienen ni la preparación ni los recursos suficientes para hacer frente a los chinches, que se reproducen a una velocidad elevada: una docena de ellos pueden convertirse en mil adultos en poco más de dos meses.
También se cita en la encuesta otros factores para este crecimiento elevado: falta de conocimiento por parte de la opinión pública, y poca atención del gobierno. Los expertos hablan también de la necesidad de dar más importancia a la experiencia de las empresas que se dedican al control de plagas, y su capacitación.
