Lucha a muerte en las palmeras
Una empresa surgida a partir de la tesis doctoral defendida por Berenice Güerri Agulló en la Universidad de Alicante ensaya con éxito unas trampas para infectar y matar con un hongo autóctono al picudo rojo.
Berenice asegura que este proceso, al no necesitar agua, evita que otros hongos proliferen y maten a la planta. Además, se ha observado que el empleo de este hongo no es tóxico para los humanos ni para la fauna asociada a las palmeras, comprobándose también que es inocuo para la flora.
El hongo Beauveria bassiana (cepa patentada GHA) es un patógeno natural de insectos. Sus esporas reconocen la cubierta del insecto-plaga y penetran en su interior, liberando posteriormente sustancias que lo digieren y lo destruyen. Su modo de acción se basa en un ataque enzimático multi-sitio evitando la aparición de resistencias por parte del picudo rojo.
La tesis doctoral “Control biológico del Picudo rojo de las palmeras (Rynchophorus ferrugineus) mediante el uso del Hongo Entomopatógeno Beauveria bassiana” es la que ha dado salida a la tecnología descrita.
El empleo del “hongo que mata al picudo” tiene la misma eficacia durante todo el año, no necesita agua para su aplicación ni maquinaria especializada. Al no necesitar agua evita que otros hongos proliferen y maten a la planta. Además, el empleo del hongo no es tóxico para los humanos, así como se ha observado inócuo a fauna asociada a las palmeras. Güerri apunta que "este nivel de especificidad no lo encuentras en los químicos".
En ocasiones, si las condiciones son las adecuadas, el hongo puede producir nuevas esporas en el exterior del insecto muerto, siendo visible el efecto. Aunque el hongo actúa desde el inicio del tratamiento, su efectividad se aprecia a partir del 4º día, cuando el insecto atacado deja de alimentarse, sufre descoordinación y pérdida de movimiento e incluso puede alterar su coloración natural.
La bióloga alicantina Berenice Gerri, explica que el ensayo ha consistido en colocar una decena de trampas a más de 150 metros de palmeras, a donde el picudo entra en busca de alimento, aunque lo que consigue en realidad es ser embadurnado con la Beauveria bassiana.
Una vez que el cuerpo de este escarabajo resulta impregnado, muere a los pocos días con el añadido de que antes disemina el hongo entre el resto de la población de picudo con el que se relaciona, lo que multiplica los resultados.
Según las muestras obtenidas, el 20% de las poblaciones cercanas de picudo han resultado infectadas mortalmente por el hongo.
Otros métodos para tratar la plaga de picudo rojo de los que ya hemos hablado en el blog son la endoterapia arbórea o el método que puso en práctica el Govern de Baleares por mediación de la UIB.