TERMITEROS SIN MACHO EN JAPÓN
En las termitas, por norma los machos y las hembras participan juntos en las actividades de la colonia. Sin embargo, en Japón, ciertos termiteros se han vuelto 100% femeninos gracias al establecimiento de una reproducción asexual.
La reproducción sexual representa la norma en la gran mayoría de los animales que viven en grupo organizado. Sin embargo, ciertos seres vivos pueden reproducirse solos mediante un fenómeno de partenogénesis. Un embrión se desarrolla a partir de un gameto hembra no fecundado. Este método es corriente en el mundo vegetal, pero también lo utilizan algunos animales cuando escasean los machos. Investigadores de la universidad de Sídney y de Kioto acaban de descubrir, en un estudio publicado en la revista BMC Biology, termiteros de la especie Glyptotermes nakajimai enteramente constituidos por individuos femeninos lo que les permitió poner de relieve que los machos pueden desaparecer de las sociedades animales adelantadas… incluso cuando antes desarrollaban un papel social importante.
Una reproducción asexual para una seguridad más eficaz
Ya se han visto colonias de insectos exclusivamente femeninas dentro de organizaciones sociales complejas, principalmente en las hormigas y las abejas. Pero se trata de grupos normalmente ya dominados por una reina y cuyas tareas sociales se basan principalmente en las obreras. En cambio, un termitero está fundado por un rey y una reina que se acoplan para dar lugar a las diferentes divisiones de su sociedad. Obreras o soldados, -no importa el sexo-, las termitas colaboran conjuntamente por el bien de su hogar…. lo que no impidió la desaparición de los machos en 37 de las 74 colonias observadas por los científicos en Japón.
Sin mezcla genética, la reproducción asexual da lugar a progenituras idénticas a la madre, lo que no es sin consecuencia para los termiteros 100% femeninos. En efecto, con la falta de diversidad genética la colonia se vuelve más vulnerable a determinadas enfermedades que podrían propagarse rápidamente y afectar los organismos genéticamente idénticos de la colonia. Sin embargo, los investigadores señalan otras características. “Las colonias asexuadas se diferencian, porque las hembras soldados tienen todas una cabeza de tamaño uniforme”. La cabeza de los soldados les sirve de escudos para impedir la entrada al enemigo en el termitero. “En las colonias 100% femeninas, los soldados representan una proporción más pequeña del termitero en comparación con una colonia mixta, lo que da a entender que la uniformidad de su cabeza les procura una defensa más eficaz frente al enemigo”. Al igual que un ejército de clones, las termitas hembras no necesitan ser numerosas para repeler, todas juntas y en un solo bloque, a la especie invasora. Y los científicos concluyen “Probablemente, esta eficacia ha contribuido a la persistencia y a la propagación de la estirpe asexuada”.
Una evolución para adaptarse a un nuevo entorno
“Las poblaciones asexuadas crecen unas dos veces más rápidamente que las colonias sexuadas porque las hembras ya no necesitan encontrar un macho para producir la generación siguiente” declaró Nathan Lo, biólogo en la universidad de Sídney que participó en el estudio. “Esta tasa de crecimiento más alta permite a las poblaciones arraigarse más fácilmente en nuevos entornos.” Ya en 2009, un equipo japonés había observado que dentro de termiteros mixtos había reinas que se reproducían solas. ¿Con qué fin? Tener herederas reales. La reina vive menos que el rey, y le deja huevos no fertilizados que son copias de ella misma. De esta manera evita que el rey se reproduzca con sus hijas y protege la colonia de los efectos nefastos de la consanguinidad. Los investigadores piensan que la presencia de desarrollo asexual dentro de las mismas colonias mixtas puede haber “pre-adaptado” los termiteros a prescindir de los machos sin la menor dificultad.
Fuente: Sciences et Avenir – Benjamin Robert