·       Tras la pandemia de COVID-19, España sigue sin regular la gestión de la calidad del aire en ambientes interiores: un aspecto fundamental en la prevención de la transmisión de enfermedades respiratorias.

·       Niños y ancianos son los mayores damnificados por este vacío legal, ya que residencias de la tercera edad y colegios son los espacios más olvidados en este aspecto y donde menos controles de la calidad del aire interior se llevan a cabo.

·       La Asociación Española de Empresas de Sanidad Ambiental (ANECPLA) reclama a la Agencia Estatal de Salud Pública, de reciente creación en el Ministerio de Sanidad, la necesaria y urgente legislación de la Calidad del Aire Interior, tal y como ya han hecho países de nuestro entorno como Francia.

Madrid, diciembre de 2023.- Somos la llamada “Indoor Generation” -mucho más aún después de la pasada pandemia y la creciente tendencia al teletrabajo-. Y es que, por regla general, los españoles pasamos más del 90% de nuestro tiempo encerrados en interiores (lo que supone más de 21 horas al día), cuyo aire está entre dos y cinco veces más contaminado que el de la calle, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

A la luz de estas aplastantes cifras, y el máster que cursamos todos los ciudadanos en el año 2020 con el impacto brutal de la COVID-19 en nuestras vidas y la evidencia de su acelerada transmisión en espacios interiores, resulta increíble que nuestro país no haya legislado una normativa específica para la regulación de la Calidad del Aire Interior (CAI). Así lo pone en evidencia la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (ANECPLA), cuyo director general, Jorge Galván, se sorprende de que “con la vuelta a la normalidad haya desaparecido toda la concienciación adquirida sobre este aspecto”. Y afirma: “la COVID-19 sigue existiendo y continúa siendo una enfermedad de riesgo para aquellas personas inmunodeprimidas, con dolencias previas o un sistema respiratorio comprometido”.

Pero no se trata solo de COVID-19. Las enfermedades respiratorias en general causaron cerca de 43.000 fallecimientos el pasado año en España, lo que las coloca como la tercera causa de muerte en nuestro país. Los niños menores de 5 años y los adultos mayores de 60 son los más afectados, siendo precisamente los colegios y las residencias los espacios donde la calidad del aire interior está menos controlada, tal y como denuncia ANECPLA.

“La contaminación dentro de las casas, las oficinas, las residencias de ancianos, los colegios, etc. es uno de los principales problemas de salud pública a nivel mundial. Pero, en Europa, mientras unos países se sitúan a la vanguardia en el estudio de este ámbito y su regulación, como es el caso de nuestro vecino francés”, denuncia Galván, “en España nos encontramos en el vagón de cola en este sentido”.

Por todo ello, ANECPLA reclama, a la Agencia Estatal de Salud Pública, de reciente creación en el Ministerio de Sanidad, la necesaria y urgente regulación en nuestro país de la Calidad del Aire en Interiores, a fin de preservar la salud de la población española.

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ANECPLA es la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental. Constituida en 1992, asocia a más de 580 empresas que representan, aproximadamente, el 85% del volumen de facturación del sector en España, y cuyos principales objetivos se centran en la consolidación de un sector profesionalizado que vele por la salud pública y el medio ambiente y la lucha contra el intrusismo.